San Cosmas de Etolia

Hieromártir Cosmas de Etolia (+1779)

Igual a los apóstoles (isapostolo), iluminador de la nación esclavizada griega, santo milagroso, hieromártir glorioso y popular.

Nacido en el pueblo de Árbol Grande de Etolia en 1714. Después de recibir las primeras letras en su tierra natal, vino para la educación superior a la Academia Atoniada del Monte Athos, donde tuvo como profesores el Palamas Panagiotis, Nicolás Tzartzoulio y Eugenio Boulgaris.

Está siendo mencionado que también estudió en Segditsa de Parnassidos, al lado del diácono Gerasimos Litsika, y el Museo Griego de la Santa Paraskevi en Gouves, Agrafa. Él enseñó a la escuela de Taxiarchis (comandante) en Lompotina y las escuelas de los pueblos vecinos.

En 1759 se convirtió en un monje en el monasterio del Filotheou y «se encajó fácilmente en los dolores de la vida única». A continuación, fue ordenado sacerdote y se convirtió en vicario de su monasterio. Pero la llama que quemaba todos los días en su corazón humilde, para la difusión del Evangelio a sus hermanos esclavizados, le llevó a Constantinopla, después de haber ejercido durante diecisiete años, como él dijo en una enseñanza suya, en el Monte Athos. Pidió la bendición del patriarca Serafín B' y el asesoramiento de su hermano profesor Chrisanto. Él recibió una información divina sobre su obra y la bendición de experimentados Ancianos del Monte Athos. Así comenzó la gran acción misionera y arrolladora para la nación.

Con un amor ardiente por Cristo y un celo profundo por la nación, se realizó cuatro grandes vueltas, casi pasando por toda la Grecia, que causan asombro y admiración. «Dondequiera que fuese el bendito, estaba ocurriendo un gran encuentro de los cristianos, y escuchaban con devoción y piedad, la gracia y la dulzura de sus palabras; y luego sucediera una gran corrección, y mejoramiento mental».

Su enseñanza era «muy sencilla, serena, como la de los pescadores y tranquila, que aparecía universalmente, estár llena de la alegría del tranquilo, y algere Espíritu Santo». Su influencia en la gente fue enorme. Multitudes de personas se reunían para escuchar al predicador divinamente inspirado. Debido a que ninguna iglesia no les cabía, él fue obligado a predicar afuera al aire libre, erigiendo una cruz y subiendo en un taburete, ya que era corto. Sus estudiantes mantenían notas, así que ahora tenemos sus enseñanzas. En el área que actualmente es Albania su prédica dio muchos frutos: «se domesticó a los salvajes, se tranquilizó a los bandidos, los despiadados y los sin misericordia se reveló misericordiosos, los irreverentes les hizo piadosos, hizo piadosos los ignorantes, educó a los groseros frente lo divino, y los hizo corriendo a los servicios sagrados, y simplemente todos los pecadores trajo a un gran arrepentimiento y corrección, así que todo el mundo decía que en sus tiempos apareció un nuevo apóstol».

Sus sermones fueron acompañados por milagros y profecías. Sus asombrosas profecías se refieren a la liberación de la Nación, el futuro de ciertas personas, ciudades y la humanidad y a las invenciones de la ciencia. Muchas de ellas fueron cumplidas con precisión.

Fue estableciendo iglesias y escuelas en todas la areas y se interesó con pasión por la educación de los esclavizados. Hizo los ricos comprar pilas para los bautismos de los cristianos, libros, cruces y cuerdas de oración (komboscinia) que distribuía a los fieles como una bendición.

San Cosmas gozaba de gran respeto por los turcos, que eran oyentes de sus enseñanzas y también sus donantes. Pero él era mortalmente odiado por los Judios, porque transfirió los bazares de los cristianos del domingo al sábado. Lo acusaron a las autoridades turcas y dando un montón de dinero a Kurt Pasha del Berat, consiguieron su asesinato. El santo escuchó con placer a su convicción.

Le colgaron en un árbol en la aldea de Kolikondasi y arrojaron su reliquia en el río Apsou. A pesar de la piedra que había sido atada en su cuello, el cadáver flotaba sobre la superficie. Fue encontrado por el sacerdote Marco y fue enterrado en el monasterio de la Theotokos (Virgen) Ardonitsas en el norte de Epiro, donde fue encontrado.

El acto canónico de su reconocimiento como un santo fue realizado por el Patriarcado Ecuménico de Constantinopla en 20/04/1961. Su secuencia y la biografía de su vida fueron escritas por San Nicodemo del Monte Athos, Sapfeirio Christodoulides, Thomas Paschidis y el monje Gerasimos Mikragiannanitis. Muchos escritores se han ocupado de la vida y obra de este Gran Santo. Numerosos iconos, grabados-en-cobre, pinturas y dibujos revelan la honra y la gratitud de la Nación para esta estrella brillante del Monte Athos. Su memoria es celebrada el 24 de agosto.

LOS SANTOS DEL MONTE ATHOS
MONJE MOSES ATÓNITA
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